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Articles by Bill Crowder

Punto de aterrizaje

El impala, un miembro de la familia de los antílopes, puede saltar hasta tres metros de altura y nueve metros de largo. Es una hazaña increíble y, sin duda, vital para su supervivencia en la jungla africana. Sin embargo, en muchos recintos de impalas en los zoológicos, verás que estos animales están encerrados en lugares con muros de solo 90 centímetros de alto. ¿Cómo pueden estos muros tan bajos retener estos animales tan atléticos? Porque nunca saltarán a menos que puedan ver dónde aterrizarán. Los muros impiden que los impalas vean lo que está del otro lado.

Un espíritu enseñable

Tristemente, se ha vuelto «normal» atacar no solo las opiniones de los demás sino también a la persona que las expresa. Esto también sucede en los círculos académicos. Por eso, quedé atónito cuando el teólogo Richard B. Hays escribió un artículo en el cual criticaba fuertemente una obra que él mismo había escrito años atrás. Así, demostró una gran humildad de corazón al corregir su propia forma de pensar en el pasado.

Diferentes

En noviembre de 1742, en Staffordshire, Inglaterra, estalló un disturbio contra el mensaje del evangelio que predicaba Charles Wesley. Al parecer, con su hermano John estaban cambiando algunas de las tradiciones de la iglesia, y muchos no pudieron soportarlo.

¡Qué grandioso es nuestro Dios!

Desde hace mucho, las huellas digitales se han usado para identificar a personas, pero pueden ser falseadas por imitaciones. Del mismo modo, el iris del ojo humano es una fuente confiable de identidad… hasta que alguien altera el patrón con una lente de contacto. El uso de la biometría para identificar individuos puede fracasar. Entonces, ¿qué es lo único aceptable como característica de identificación? Los patrones de los vasos sanguíneos son particulares y virtualmente imposibles de falsear. Tu «mapa venoso» es un identificador excluyente que te distingue de cualquier otra persona del planeta.

La esencia de la oración

Cuando Abraham Lincoln se convirtió en presidente de los Estados Unidos, tuvo que dirigir a una nación dividida. Se lo considera un líder sabio y con un carácter moral elevado, pero otro elemento de su formación fue quizá la base de todo lo demás. Entendía su incapacidad para la tarea, y ¿cómo respondía ante esa incapacidad? Dijo: «Muchas veces fui llevado a ponerme de rodillas ante la abrumadora convicción de que no tenía otro lugar adonde acudir. Mi sabiduría y la de quienes me rodeaban parecían insuficientes ese día».

Jamás olvidado

Cuando pensamos en misioneros pioneros del pasado, el nombre George Liele (1750-1820) no viene a la mente. Tal vez debería. Nacido en la esclavitud, conoció a Cristo y obtuvo su libertad antes de la Guerra de la Independencia de Estados Unidos. Llevó el mensaje de Jesús a los esclavos en Jamaica y fundó dos iglesias afroamericanas en Georgia, Estados Unidos, una de las cuales es considerada la «iglesia madre de los bautistas negros».

Esperanza genuina

A principios de la década de 1960, los estadounidenses preveían un futuro brillante. El joven presidente John F. Kennedy había presentado la Nueva Frontera, el Cuerpo de Paz y la tarea de llegar a la luna. Una economía floreciente hizo que muchos esperaran que el futuro fuera simplemente «disfrutar de la vida». Luego, se desató la guerra en Vietnam, Kennedy fue asesinado, y las normas aceptadas de esa sociedad anteriormente optimista se desmantelaron. No alcanzó con el optimismo; prevaleció la desilusión.

Hermosamente roto

Nuestro autobús llegó por fin a nuestro tan anticipado destino: una excavación arqueológica en Israel donde nos dejarían excavar un poco. El director de la obra nos explicó que cualquier cosa que encontráramos no había sido tocada por miles de años. Al desenterrar fragmentos de cerámica, nos sentimos como si estuviéramos tocando historia. Al rato, nos llevaron a una estación de trabajo donde estaban restaurando esos fragmentos de vasijas rotas hacía muchísimo tiempo.

Un corazón agradecido

Séneca, el gran filósofo de la antigua Roma, fue acusado de adulterio por la emperatriz Mesalina. El Senado lo sentenció a muerte, pero el emperador Claudio decidió exiliarlo a Córcega, quizá porque sospechaba que la acusación era falsa. Tal vez ese indulto motivó la perspectiva de Séneca sobre la gratitud, al escribir: «homicidas, tiranos, ladrones, adúlteros, asaltantes, sacrílegos y traidores siempre habrá, pero peor que todo eso es el crimen de la ingratitud».

Discernimiento de parte del Espíritu

Mientras el soldado francés cavaba en la arena del desierto, reforzando las defensas del campamento de su ejército, no tenía idea de que haría un descubrimiento trascendental. Al mover otra palada de arena, vio una piedra… pero no era cualquier piedra, era la piedra de Rosetta, que contenía leyes y gestiones del rey Ptolomeo V, escritas en tres idiomas. Esa piedra (ahora en el Museo Británico) sería uno de los hallazgos arqueológicos más importantes del siglo xix, que ayudaría a revelar los misterios de los antiguos jeroglíficos egipcios.